la tripulación era egipcio
yugoslava marroquí siciliana...
El alemán cuidaba de los tigres
Omar de los elefantes
estaba enamorado de ellos
Apareció muerto un día entre sus patas
Las pantera me ignoraban en Tesalónica
en Teheran eran arcos voltaicos
cuando oian mis pasos
Nosotros comíamos opio
a los pies de los montes Erbuz
cada noche con los pies fríos
Y cantábamos la misma canción todos los días.
Adorábamos levar anclas
y soñábamos siempre con otra ciudad
Belgrado Venecia Roma Istambul
Teheran Sarajevo...
siempre otra ciudad
donde sin duda estaba ella
(continuara)
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